Las acciones se desplomaron el viernes, culminando una semana volátil de operaciones, un día después de registrar un repunte histórico.
El Promedio Industrial Dow Jones cayó 403.89 puntos, o un 1.34%, para terminar el día en 29,634.83. Aun así, el índice subió un 1.15% en la semana. El S&P 500 cayó un 2.37% a 3,583.07 y registró su séptimo cierre negativo en ocho días. El Nasdaq Composite cayó un 3.08%, terminando el día en 10,321.39, afectado por las pérdidas en Tesla y Lucid Motors, que retrocedieron un 7.55% y un 8.61%, respectivamente.
Las acciones cayeron a mínimos de la sesión después de que una encuesta de consumidores de la Universidad de Michigan mostrara que las expectativas de inflación estaban aumentando, un sentimiento que la Reserva Federal probablemente esté observando de cerca. El Nasdaq, de gran peso tecnológico, lideró las caídas, ya que las empresas en crecimiento son más sensibles a las alzas de las tasas de interés.
Al mismo tiempo, los rendimientos de los bonos se dispararon. El bono del Tesoro de Estados Unidos de 10 años superó el 4% por segunda vez en dos días, ya que los inversores reaccionaron ante las mayores expectativas de inflación.
Los mercados se agitaron a lo largo de la semana cuando los inversores sopesaron los nuevos datos de inflación que analizará la Fed mientras continúa subiendo las tasas de interés para enfriar los aumentos de precios. El jueves, las acciones dieron un giro importante. El Dow terminó la sesión del jueves con una subida de 827 puntos después de haber bajado más de 500 puntos en el mínimo intradiario. El S&P 500 subió un 2.6% para romper una racha de seis días de pérdidas, y el Nasdaq Composite subió un 2.2%.
El jueves marcó la quinta reversión intradía más grande en la historia del S&P 500, y fue la cuarta más grande para el Nasdaq, según SentimenTrader.
Los movimientos se produjeron después de la publicación del índice de precios al consumidor, una lectura clave de la inflación de Estados Unidos que llegó más caliente de lo esperado para el mes de septiembre. Inicialmente, esto pesó en los mercados, ya que los inversores se prepararon para que la Reserva Federal continúe con su agresivo plan de aumento de tasas.
La inflación persistente continúa siendo un problema para la Fed y preocupa a los inversores sobre el endurecimiento de la política del banco central.
"Con el IPC subyacente todavía moviéndose en la dirección equivocada y el mercado laboral fuerte, las condiciones no están dadas para un giro de la política de la Fed, que sería una de las condiciones para un repunte sostenido en el mercado de valores," escribió el director de inversiones de UBS global Wealth Management, Mark Haefele, en una nota del viernes.
"Además, a medida que la inflación se mantiene elevada durante más tiempo y la Fed aumenta aún más, aumenta el riesgo de que el efecto acumulativo del endurecimiento de la política empuje a la economía estadounidense a la recesión, socavando las perspectivas de ganancias corporativas."
Traducido por Jacqueline Mata
